El cepillo dental puede que sea una de las herramientas bucales a las cuales menos importancia se les da, pese a ello, debería ser una de las costumbres más importantes para todos los seres humanos.

Los filamentos de los cepillos, así sean eléctrico o bien manuales, padecen un desgaste debido al empleo, hay que tomar en consideración que, por lo menos, nos cepillamos los dientes un par de veces al día a lo largo de 2 minutos cada vez, lo que va provocando un deterioro de los filamentos del cepillo restándole eficiencia y siendo un factor para la acumulación de biofilm en dientes y margen gingival.

Ese desgaste en los filamentos reducirá la capacidad funcional del cepillo teniendo como consecuencia un mal resultado en la supresión de bacterias, lo que puede provocar enfermedad de caries y nosología periodontal.

La duración de un cepillo dental y el instante en que debe mudarse depende del género de cepillo y de su empleo.

Al tiempo que ciertas personas se cepillan los dientes con tanta fuerza que el cepillo solo les dure dos semanas, a otras les dura más tiempo merced a la suavidad y la poca presión que ejercitan al cepillarse.

Evitar las bacterias en el cepillo de dientes

Si no reemplazas el cepillo dental de forma regular, corres el peligro de que la limpieza de tus dientes sea deficiente, lo que puede provocar la capacitación de placa bucal y ocasionar caries, mal aliento o bien otras enfermedades.

Acá te damos 3 consejos para sostener una mejor higiene del cepillo de dientes:

  1. Aclara bien el cepillo dental con agua limpia tras emplearlo y ponlo en un recipiente con las cerdas cara arriba a fin de que se sequen al aire.
  2. Evita el contacto directo entre el cepillo dental y el ambiente que lo rodea. Otro consejo es guardarlo en un mueble o bien cajón.
  3. Usa un soporte diferente para cada cepillo dental. Las bacterias pueden pasar de un cepillo a otro si este se guarda en exactamente el mismo soporte que el cepillo dental de otro miembro de la familia.

No compartas cepillo dental con otras personas, usa solo el tuyo.

Cambiar el cepillo de dientes después de estar enfermo

¿Sabías que debes mudar el cepillo dental por uno nuevo tras haber estado enfermo? Así, no vas a llevar las bacterias contigo tras estar enfermo.

Está claro que un cepillo nuevo limpia los dientes mejor y más con eficacia que uno utilizado, mas hay otras razones por las que debes mudar de cepillo. Por servirnos de un ejemplo, tras estar 3 meses usando exactamente el mismo cepillo dental, probablemente asimismo contenga ciertas bacterias.

Cómo recordar cuándo cambiar el cepillo de dientes

Una investigación efectuado en Noruega sobre las ventas de cepillos dentales muestra que los usuarios acostumbran a mudar el cepillo dental dos o bien tres veces por año, lo que significa cada cinco con dos meses. Eso es prácticamente un par de veces menos por año de lo aconsejado.

Estos son ciertos consejos que te van a ayudar a rememorar que debes mudar el cepillo dental como se aconseja:

Reemplaza el cepillo dental con cada cambio de temporada: invierno, primavera, verano y otoño.

Cambia el cepillo dental toda vez que te vayas de vacaciones o bien en todos y cada periodo vacacional. Así, comenzarás tus vacaciones con aires renovados.

Cambia el cepillo cuando adquieras pasta de dientes: Es simple olvidarse de apuntar el cepillo dental en la lista de la adquisición. En consecuencia, un buen consejo es mudar el cepillo toda vez que adquieras pasta dentífrica.

Cambia tu cepillo dental o bien el cabezal del cepillo

Por el hecho de que sin importa qué género de cepillo dental utilices, las cerdas se pueden deshilachar y gastar, y pueden perder su eficiencia. Investigaciones clínicas prueban que un cepillo dental nuevo puede remover más placa que uno gastado, y de este modo asegura que tu cepillo marcha al límite para asistirte a sostener una dentición limpia y sana.

Enfermedades

Las cerdas del cepillo dental no pueden matar las bacterias que se hallan en la boca, resguardarte de alguna enfermedad o bien eludir que te enfermes. De ahí que asegúrate de mudar tu cepillo de manera regular para asegurar la máxima eficiencia y para una higiene cautelosa, sin importar lo más mínimo el género de cepillo dental que emplees.

Cuidar su cepillo dental

Es esencial rememorar, que lo esencial no es solo mudar el cepillo periódicamente, si no intentar cuidarlo mientras que lo estamos usando.

 Puedes iniciar asegurándote de que esté seco entre un empleo y otro, puesto que las bacterias, gérmenes y hongos aprovechan el ambiente húmedo para desarrollarse y van incrementando con el tiempo.

Asimismo debes sostenerlo en un área donde el cepillo se ventile puesto que es un fallo común guardarlo en un portacepillos o bien un cajón.

Por consiguiente, y como conclusión, como es bastante difícil rememorar en qué momento adquirimos el cepillo dental, cuando menos sí es preciso que estemos pendientes de su aspecto exterior para percibir exactamente en qué instante sus cerdas comienzan a abrirse y a perder consistencia.

¿De qué forma debe ser un buen cepillo?

La función de un buen cepillo es suprimir el biofilm oral sin dañar el esmalte bucal (dos) y para esto debería cumplir los próximos requisitos:

  • Filamentos de Tynex® de calidad y dureza convenientes, con la punta redondeada y texturizada para efectuar una limpieza eficiente sin dañar los tejidos blandos ni estropear la superficie del esmalte, dejando el acceso a los espacios interproximales.
  • Cabezal de tamaño conveniente y con forma adamantina, levemente más angosta por un extremo, que deja llegar a las zonas siguientes de la cavidad bucal, más bastante difíciles de lograr. La longitud del cabezal he de ser equivalente al área que ocupan de 2 a 3 dientes anexos.
  • Cuello dúctil que favorece la accesibilidad y deja su flexión hasta adquirir la situación que mejor se amolda a la cavidad bucal.
  • Mango con apoyo ergonómico antideslizante y flexible.

Como es esencial que el cepillo cumpla una serie de peculiaridades, lo es asimismo la manera en que se emplea y se guarda. Ahora, ciertos consejos para sostener el cepillo limpio y en buen estado.

  • No se debe compartir el cepillo dental.
  • Hay que enjuagarlo con agua del grifo tras emplearlo para quitar restos de pasta bucal y otros restos.
  • Se debe guardar en situación vertical. Si guardamos múltiples, debemos sostenerlos separados a fin de que los microorganismos no se trasfieran de un cepillo a otro, por esta razón resulta conveniente que el cepillo disponga de un capuchón protector para eludir cualquier género de polución. Este no he de ser completamente cerrado, es esencial que tenga agujeros a fin de que los filamentos del cepillo puedan airearse.