En Clínica dental Los algodones, buscamos la manera de poder preservar totalmente tu salud bucal, esperando que puedas enseñar tu sonrisa sin avergonzarte de que tus dientes estén amarillos, con caries, piezas faltantes y mucho más.

Pero ¡Adivina qué! Por suerte, nos consideramos uno de los sitios web más informativos del momento, por lo que en nuestra página vas a poder hallar una gran cantidad de información.

Recuerda que en caso de tener alguna duda, puedes contactarnos al privado, o simplemente dejarnos un mensaje en los comentarios, al cual responderemos o haremos un post en base a ello.

Términos odontológicos por la letra G, H, I, J

A continuación, vas a poder conocer cierta cantidad de palabras que probablemente nunca antes habían pasado por tu mente, pese a ello, en esta ocasión esperamos sorprenderte un poco al respecto.

En este post hemos decidido integrar varias letras debido a que son pocas las palabras que pueden llegar a conocerse.

Esperamos ser lo más claros posibles, de forma que si tu odontólogo te dejo alguna duda, pues nosotros aclaremos cada una de las incógnitas que poseas, normalmente algunas palabras son poco escuchadas en los consultorios, ya que al paciente debe explicársele de otra forma.

1.    Gel de grabado – Ácido ortofosfórico

El ácido fosfórico, asimismo llamado ácido ortofosfórico o bien fosfórico, es un ácido enclenque con la fórmula química H3PO4. En general se halla en forma de jarabe incoloro al setenta y cinco o bien ochenta y cinco por ciento de concentración en agua. El compuesto puro es un sólido incoloro.

Los 3 átomos de hidrógeno son ácidos en diferentes grados y se pueden perder de la molécula como iones H + (protones). Cuando se suprimen los 3 iones H +, el resultado es un ion ortofosfato PO43−, generalmente llamado “fosfato”. La supresión de uno o bien 2 protones genera el ion fosfato dihidrógeno H2PO – cuatro y el ion fosfato hidrógeno HPO2−4, respectivamente. El ácido ortofosfórico asimismo forma ésteres llamados organofosforados.

El ácido fosfórico se halla de forma frecuente en los laboratorios químicos como una solución aguada al 85% , un líquido viscoso incoloro, inodoro y no volátil. Si bien el ácido fosfórico no cumple con la definición rigurosa de ácido fuerte, la solución al ochenta y cinco por ciento puede irritar gravemente la piel y dañar los ojos.

El nombre “ácido ortofosfórico” puede emplearse para distinguir este ácido particularmente de otros “ácidos fosfóricos”, como el ácido pirofosfórico. No obstante, el término “ácido fosfórico” de manera frecuente significa este compuesto específico; y esa es la nomenclatura actual de la IUPAC.

2.    Hilo retractor      

El hilo retractor es una solución astringente usada para aplicar en el atravieso gingival para mover los tejidos para la toma de impresiones o bien cuando se requieren áreas secas. La presión ejercida por el hilo y la acción del astringente causan una inmejorable retracción reduciendo o bien inhibiendo en forma temporal el rezumado en el atravieso gingival; deteniendo la hemorragia leve por precipitación de proteínas.

Se trata de un hilo de algodón/poliéster empapado con cloruro de aluminio hexahidratado, que le da un suave efecto astringente y unas excelentes propiedades hemostáticas. Aparte de esto Racestyptine contiene base de lidocaína para reducir al mínimo las molestias en el paciente durante la inserción.

3.    Hoja de bisturí

Todo el planeta relaciona las hojas de escalpelo con la cirugía y, si tomamos en cuenta eso, sí tiene sentido que estas cuchillas se comercialicen tan afiladas.

No obstante, lo que quizás no todo el planeta sabe, es que esta clase de cuchillas pueden usarse en otras muchas aplicaciones además de en la sala de operaciones.

Los bisturís son geniales por su precisión y capacidad de maniobra en espacios reducidos. De ahí que, son tan útiles en laboratorios y factorías —y en verdad en cualquier ambiente en que se requiera recortar o bien raspar con precisión— singularmente en áreas que son angostas o bien bastante difíciles de lograr.

Además de esto, a los artesanos asimismo les agradan los bisturís por su capacidad para realizar trabajos con detalles meticulosos y también complicados.

4.    Irrigantes endodoónticos

Substancias que se emplean a lo largo de la fase de instrumentación para quitar materia orgánica y también inorgánica del sistema de conductos radiculares.

  • Hipoclorito de sodio: Es el irrigante más empleado en endodoncia. Se puede emplear con diferentes concentraciones y temperaturas. Disuelve materia orgánica.
  • Ácido etilendiaminotetraacético (EDTA): Es el quelante más usado en endodoncia y se comercializa en forma de gel, en monodosis o bien en jeringuilla, y como líquido en frascos de cristal. La concentración que se emplea es del 17% . Disuelve materia inorgánica (barrillo dentinario) y facilita la preparación de los conductos.
  • Ácido cítrico: Quelante que se emplea con una concentración del diez por ciento para disolver materia inorgánica de los conductos radiculares.
  • Clorhexidina: Se emplea en endodoncia al dos por ciento en conductos con ápices muy grandes debido a reabsorciones, apicogénesis incompleta, etcétera Se identifica por su poder antibacteriano y disuelver materia orgánica.
  • MTAD: Es una mezcla de un isómero de la tetraciclina (doxiciclina) con un ácido (cítrico) y un limpiador (Tween ochenta). Se acostumbra a emplear en combinación con el hipoclorito de sodio.

5.    Jabón antiséptico

Cuando charlamos de jabón aséptico nos referimos a una solución que une el jabón o bien limpiador con asépticos, o sea con substancias que previenen o bien suprimen bacterias y virus. En este género de jabones el aséptico es el principio activo más valioso, en tanto que gracias a él se suprime cualquier indicio de gérmenes.

Este género de jabón contiene ingredientes antimicrobianos cuya función primordial es supervisar la polución por microorganismos, trayendo consigo la prevención de enfermedades como infecciones de piel y gastrointestinales, entre otras muchas.

6.    Jeringa de anestesia con aspiración

Instrumento de acero inoxidable para la administración del anestésico local en la zona que se quiere anestesiar.

Cuenta con un arpón que se enrosca en el émbolo de silicona del carpule de anestesia para facilitar su aspiración y revisar que es segura la inyección del anestésico.